Vino Tinto

Malahierba Tempranillo nace con la intención de expresar también otra variedad, la mayoritaria en la Sierra de Salamanca: la Aragonés. Se trata de un tempranillo adaptado a la zona, con uvas más pequeñas y piel más fina, que ofrece vinos más inmediatos, con mayor acidez, menos grado alcohólico y más fáciles de beber. Su origen está en San Esteban de la Sierra, uno de los pueblos más altos de la denominación, a más de 900 metros de altitud. Allí, el viñedo se asienta sobre suelos de granito, poco habituales para el tempranillo, que aportan una frescura característica al vino.

La crianza se realiza durante unos diez meses en barricas de roble francés de segundo uso, con tapas de madera de acacia. Esta madera favorece una mayor aireación durante el proceso, lo que contribuye al carácter fresco y equilibrado del vino.”

760 botellas elaboradas.

Fino, elegante, fresco y fácil de beber.